Me estremeció una mujer...

Hay alguien que lleva en mi vida escondida durante un tiempo, pero por suerte, desde hace relativamente poco, se viene descubriendo  y presentando como un ambicioso proyecto de "mujer"  con todas las de la ley. Adoro a las mujeres  que llevan a la práctica aquello de "think out of the box", como nos enseñó ATM. Además de eso, admiro a las mujeres firmes, independientes; que no buscan excusas o quejas en su falsa debilidad; que no se disfrazan de feministas baratas y demagogas para defender lo indefendible. Al otro lado de la baraja  me repugnan las mujeres que desprecian a los hombres y los tildan de inmaduros   simplemente porque no soportan  verse ninguneadas, poco valoradas o o con la necesidad de vacío al no tener a ese elemento que se supone da estabilidad. Esa frase maldita que siempre dicen "necesito a alguien que...." y no se dan cuenta que muchos de  nosotros dejaríamos todo si la frase cambiara  a "te necesito a tí" 

Mujeres que no necesitan hombres para sentirse realizadas. Mujeres que sacan sus vidas adelante, sus hijos, su casa. Mujeres que pisan fuerte, duras de carácter; sensibles pero firmes como rocas gigantes. Elegantes, coquetas, dominando con miradas, insinuaciones, andares, gestos y sobre todo, con palabras justas. Cultas, ágiles mentalmente, poderosamente intuitivas, socarronas incluso, irónicas.  No se si existiría, pero como dije antes, aquí les presento a un posible proyecto

Una seminiña asustada, recientemente adolescente, y escribe así:

Me encanta cuando lloras. Y digo que me encanta porque sé que lo haces porque valoras hasta el más mínimo detalle, porque valoras la vida, porque la vicon intensidad.
La alegría. Tu risa… Tu risa es tan perfecta, como se esconden tus pupilas a medida que se hace más viva. Al acabar siempre terminas por cerrar esos ojos castaños y bajas la mirada al suelo, como si te acongojara que te miraran.
La tristeza, algo que no quiero ver nunca en tus ojos. Si lo hiciera, que fuera lo justo y necesario para disfrutar del júbilo que llegaría al compás, a ese compás en el que armonizas todo, el que sin querer acaba en una sonrisa al oír un “te quiero”… Pero nunca quiero ver esa pena que dejan sus ojos, ya que en ellos reside el cariño de antaño, y no el amor con el que comenzasteis a construir los recuerdos.
La rabia. Esa impotencia que nace al saber que en realidad nadie te comprende, que muchos pueden haber vivido similares, pero esta historia es la tuya. Tuya y de nadie más.
Y el miedo, que siempre simpatiza con lo desconocido, con aquello que no sabemos cómo es ni a donde nos llevará. Si conseguimos enfrentarnos a él nos llamarán valientes, pero, ¿no es la valentía solo es un acto de supervivencia? Puedes vivir con miedo, o tirar de la solidez de la razón y llegar a donde quieres, a donde te propones sin que la aprensión se presente en tu puerta.


El contenido y el cómo escribe presagia un gran futuro verdad? La pienso perseguir  el tiempo necesario para que no se relaje ni un momento. Es buena, pero ya saben una de mis frases preferidas: "el que deja de mejorar, deja de ser bueno". Debe perseguir la excelencia: esa palabra que todos tienen tan lejana y que ella, sin embargo tiene  la obligación de alcanzar. Es injusto. Es una tremenda putada , pero tiene la obligación de perseguirla.  Debería poder liberarse y ser feliz, no obstante hay muchas almas que la necesitan. Sí. la necesitan. Bienvenida al mundo de los pesimistas, inconformistas; de los creadores y genios; de los valiosos. Atrévete.