sábado, 26 de marzo de 2011

Divagaciones sobre un tema, de Javier Salvago

La madurez debe ser esto,
este cansancio, esta desgana,
este saber, ya de antemano,
que nada sirve para nada.

La claridad que nos despierta
a una inclemente y gris mañana,
la claridad que ahuyenta sueños
de juventud, y nos desalma.

Este abandono, esta renuncia
al ideal y la esperanza,
este vender al dios que fuimos
por bagatelas y migajas.

Dejarlo todo para luego
-amigos, vida, libros, causas-
porque otras cosas que no amamos
están ahí y nos reclaman.

Sentir el viento, sobre uno
como una loza o una espada,
y ver que el tiempo se no va
de entre las manos, se acaba.

La madurez debe ser esto,
comprender cosas que espantaban
vistas desde lejos, comprender
que uno está preso en una trampa.

1 comentario:

Coach ATM dijo...

Pues, sí. En general es eso.