viernes, 15 de octubre de 2010

The Story Of Stuff

Este vídeo nos lo pusieron el otro día en Microeconomía y me pareció interesante compartirlo con ustedes. Es bastante conocido y muy probablemente muchos ya lo hayan visto, pero aún así lo quería poner para aquellos que no (como yo hasta el otro día).
La verdad es que las cosas que dice están muy bien expresadas, explicadas y bien argumentadas. Pero lo que a mí me encanto de este corto presentado por Annie Leonard, no es el fin en sí mismo, que sí, te hace plantearte cosas y te cambia un poco la concepción del mundo; lo que a mí de verdad me gustó de la presentación fue la claridad y sencillez con la que está desarrollado y el apoyo que hace todo el rato en las animaciones que son Geniales. Es un modo de presentación muy interesante para cierto tipo de proyectos y por eso me apetecía que le echasen un vistazo cuando tuvieran un ratito...y de paso pensaran un poco en las cosas que dice. Merece la pena.


Os dejo dos versiones; esta primera está en español latinoamericano, y se puede ver bien.




Y esta es la versión original, para aquellos que lo quieran/puedan verlo en inglés.



martes, 5 de octubre de 2010

Batiburrillo de things

Estas semanas atrás han sido bastante diferentes en todos los aspectos.

En primer lugar quisiera dejar constancia de que he vuelto a repetir segundo de bachillerato, debido a cuestiones y preguntas existenciales y por otras un tanto, digamos… ¿Vagancia, pereza, irresponsabilidad, estupidez en gran medida? Todo esto unido al hecho de que creí estar enamorado, basándome en una simple e insignificante idea, una semilla implantada en lo más profundo de mi subconsciente, una mirada… en fin no voy a dar detalles ya que esto simple y llanamente me lo guardo para mí. Solo voy a matizar una cosa: es increíble cómo puede uno engañarse así mismo de manera tan exagerada. En fin.

Desde hacía unos meses me surgían pensamientos nefastos, amargos, pesimistas, siniestros, lóbregos y muchas de esas noches en las cuales me invadían estos oscuros pensamientos esperaba que mediante la primera y segunda puerta de abstinencia del dolor por la mañana consiguiera estar recuperado… pero me equivocaba. Seguían ahí, tergiversando, manipulándome, haciéndome ver futuros lejanos y otros no tan lejanos en los que yo no aparecía. Esto, aunque no lo mostraba, me destrozaba. Llorar, sin razón aparente mientras me duchaba, la mirada fija en esos brillantes diamantes de la cúpula negra cuando no había nubes, la pérdida total de la noción del tiempo, en fin…

Sin embargo he tenido la suerte, y doy gracias a Dios (en realidad no, prefiero dárselas a Adrián, Tommy, Rita, Patricia, mi madre y mi padre, mi hermano Abián… probablemente se me quede alguien en el tintero pero ellos/as saben que los quiero) de haber tenido, tengo y tendré personas que me aprecian y me quieran. Creo que después de la muerte lo más trágico es estar solo. Solo en la inmensidad, solo con tus pensamientos, solo… me dan escalofríos mientras escribo.

Pero no todo es un caos de sensaciones y pensamientos. Es increíble como una persona puede influir en ti de forma positiva con unas simples palabras.

AMIGOS/AS, PROFESORA, FAMILIA… gracias de verdad, no podéis haceros una idea jejej

Promesas

Tiempo hace de mi última entrada. Varias han sido las veces en las que he querido precipitarme en este blog para vomitar ideas, sentimientos, sensaciones, pensamientos, reflexiones...Quería un retorno brillante, pero sólo he podido conseguir esto.

La vida vuelve a tener sentido.



domingo, 3 de octubre de 2010

Abra cadabra, pata de cabra!


Con mucho disimulo y sin mérito alguno la pelota saltarina ha sido una constante en mi vida desde que cayó en mis manos por mera casualidad en los tiempos de Argelio. Un año de minibasket  fue el principio y el fin de mi sprint deportivo. Luego amagué una vuelta a las edades de cadete pero la defensa de la vida ni se inmutó y de culo caí, quedando todo reducido a horas de educación física, recreos y ocasionales fines de semana en un polideportivo de San Miguel. Por eso me resulta irónico que ahora que algunos de ustedes han dado un pasito para atrás frente al baloncesto yo vaya y me tire de cabeza a la piscina de un senior de segunda autonómica, y no me pidan más que ya es un pedazo de salto para mí.

LÉGAMO! Grito mientras salgo a la nueva cancha que han abierto en mi nuevo mundo, el mundo en el que no termino de empezar. Corro como si mis zapas tuvieran alas, corro tan rápido que no se si realmente estoy asimilando todas las nuevas jugadas que se me presentan. Justo antes de que cada balón me llegue, mi estomago se retuerce sobre sí mismo y el corazón late tanto que está a punto de estallar, es el miedo. Ese cabrón siempre aparece en el peor momento para intimidarme con sus dolorosas dudas y su conformidad pesimista. Pero cuando el cuero hace contacto con la epidermis de las yemas de mis dedos surge la magia, esa magia que hace que la activación de los neurorreceptores táctiles desactive todo los demás, esa magia que me absorbe y que me escuda por completo ante cualquier ataque de realidad, esa magia que ustedes conocen mucho mejor que cualquiera y que compartieron conmigo consciente o inconscientemente desde el primer momento, la cantidad suficiente para mantener al pequeño alevín vivo dentro de mí, latente durante 9 años, torpe y nervioso, pero vivo al fin y al cabo.

Ahora les dejo que tengo que entrar hasta la cocina y luego a defender los puntos que he ganado, no pienso dejarlos remontar, porque serán mi pequeña aportación a la eternidad.

PD: a ver si ahora que estoy en Madrid quedamos los nómadas para crear un par de anécdotas de esas que prometí.