miércoles, 9 de diciembre de 2009

Dulce y Solitario


De noche. Centro comercial muy agradable a las afueras de Las Palmas. Totalmente iluminado para no desentonar con la época, con un par de fuentes (de agua limpia) adornadas por dentro con luces de muchos colores que dan una impresión de diversión. Algunos castillos hinchables con pocos niños/as vigilados/as por pocos padres. Además algo curioso que llama bastante la atención, un miniteatro en medio de la planta baja (al aire libre) junto a las fuentes y a los hinchables, acompañado de un equipo de música con gente que toca instrumentos de verdad (guitarra, teclado,...), allí mismo. Las tiendas (algo interesante y rotundo acerca de esto: http://xlsemanal.finanzas.com/web/firma.php?id_edicion=4587&id_firma=9870), casi un 40% cerradas, y las que están abiertas casi vacías, la mayoría pequeñas, desconocidas y en muchos casos aburridas. Contraste incomprensible con el propio lugar. Del mismo modo, impacta el vacío de gente a nuestro alrededor en Viernes tarde.
Ésto se aprecia a primera vista. Mientras, caminamos sin pausa hacia nuestro destino. Una cafetería (también con poca gente) sencilla, atractiva y con un ambiente acaramelado. Quizás por la primera impresión que da el decorado. Rosado y celeste, adornado con fotos en blanco y negro por toda la pared, y detalles curiosos como por ejemplo una Jukebox. Por supuesto, todo ambientado en una cafetería (se supone que imita a la gasolinera de la película "Américan Graffiti", o eso me explicaron. Yo aún no la he visto) americana antigua, bancos azules en vez de sillas, una barra con taburetes rosas a juego con todo, e incluso, las camareras vestidas de los mismos colores que el propio lugar. Con una ropa que parecían la mujer de la lechera.
Para decepción de Sergio, nos viene a atender la camarera que no va con el uniforme. Nos da unas cartas con forma de Vinilo y pasaron cinco o seis minutos hasta que empezamos a ojear y dejamos de hacer el petardo con el disco. La carta no es muy extensa, sin embargo, con lo que me había comentado Sergio, no me conseguía ubicar para encontrar lo que estaba buscando. Mi esperado batido. Le pregunto a él, y me dice que tiene que ser de helado de fresa, vainilla o chocolate; sorprendido-decepcionado con cara de "nada más?", reproché. Y es entonces cuando, meticulosamente y con una sonrisita en plan Sergio, me da los detalles y los pasos a seguir para pedir lo que buscaba. Ya me estaba relamiendo.
Viene la camarera (la que vestía sin uniforme Rosa&Azul, la de antes) y Sergio dice:
-Queremos batidos gigantes.
La chica ya soltó una pequeña sonrisita con la afirmación de Sergio. Entonces yo empecé:
-Bueeeno. Quiero uno de vainilla. Coooooooooooooooooooooooooooooooooooooooon:
·Plátano
·Galletas
·Dulce de Leche
·Miel
·y Nata
Sergio pidió el suyo y la chica se fue un poco espantada, para nuestro no asombro. Jugamos unos minutos más con los vinilos y llegaron los batidos. ¡Qué pasada! ¡Espectacular! Un litro (o casi un litro) de batido fresquito y riquísimo, servido en un gigantezco vaso de cristal. Abrumador. Sin duda mereció la pena ir a Gran Canaria a probar aquello.


...todas estas cosas es lo que pasaba alrededor de nosotros, pero lo que paso entre nosotros fue igual o incluso más espectacular, a pesar de que no lo haya querido redactar. Hablamos mucho. De muchas cosas.
Me resulta curioso como un sitio tan espectacular estaba tan solitario y aburrido ese Viernes (al menos ese viernes). Le faltaba música alegre sonando y gente que la escuchase. Le faltaba un ambiente más vivo. Era como si caminases por un lugar genial pero triste y desganado. Dulce y solitario.


PD: al día siguiente volvimos de casualidad, porque quedamos allí con Juanki & Co. Y me pedí uno de Fresa con:
·Plátano
·Galletas
·Mermelada
·Sirope
·y Nata

5 comentarios:

Unknown dijo...

yo kierooooooooooooooooooooooooooo!!!!

Ezequiel H.M. dijo...

Pos tendré que visitar Gran Canaria sin lugar a dudas!!!

Coach ATM dijo...

Ahora cuenta algo de todo lo demás.
Un poquito por lo menos.

Juanki Rivero dijo...

que suerte poder copartír esos momentos. Que suerte tener a sergio y poder hacer de anfitriones otra vez. Que suerte tener un 8.5 de puntuación.

Gabriel dijo...

me entristezco leyendo esta entrada porque en mi pueblo solo puedo pedir o agua o refresco o un cubata :,(
lo conseguiste adri ponerme celoso :)