lunes, 30 de noviembre de 2009

De OCA a OCA

Bienvenidos a bordo del Delorian. Este viaje en el tiempo nos transportara hasta el Verano del 71.

Por cierto, dado que este blog es multidirecional, quiero aprovechar nuestra común afición cinéfila, para recordar y proponer a quien no la haya visto, una película mítica. Va dedicada a esos iniciales hormigueos en el estomago provocados por los amores tempranos. “Verano del 42” es el titulo y estoy seguro que os hará sentir bien. La recordareis cuando la enfermedad del amor os impida guerrear en el quehacer diario de la vida. Película llena de candidez, curiosidad y ternura.

Bueno la cosa es que estamos en el verano del 71 y por esa ventanilla del Delorian podemos ver a un Andrés de 15 años, rubito, delgado y lo suficientemente pijillo como para ser un niño del Barrio Salamanca (mi barrio). Indudablemente guapo y como no, seductor ( je je je).

En el baloncesto unos meses antes, con mi Club, Estudiantes de Madrid, acabábamos de quedar Campeones de España Infantil en el Primer Campeonato de España de Clubs que se celebraba (hasta ese momento en esa categoría solo se jugaban los campeonatos por colegios).
NOTA.
En esos años las edades de las categorías de los jugadores no correspondían a las actuales

En resumen estaba en pleno esplendor. Éxito en baloncesto y un autentico triunfador ante las impresionadas e impresionables muchachas de la época. Para que os hagáis una idea, algo similar a los fantásticos e irresistibles muchachos de Arona que pululan por este prestigioso blog. Eso si, sin tabla de surf.

En el Estudiantes había la buena costumbre de que los jugadores de los equipos “A” entrenaran a chicos más pequeños. El objetivo era mantener vivo el espíritu del Club por un lado y por otro, en caso de no llegar a ser jugador de alto nivel (cosa que ocurría a la mayoría), fueras saboreando las mieles de ser entrenador.

Como es fácil deducir ese fue mi caso y más cuando por culpa de aquella espinilla, mi estomago empezó a crecer, a crecer y seguir creciendo. Y ocurrió aquello que decía una antigua jugadora mía (aix… como se estropean los cuerpos con el paso del tiempo).

Estamos entonces definitivamente ubicados en aquel verano del 71 y, je je je, seguramente basado en ese instante de gloria personal, recibo mi primera oferta como entrenador profesional, es decir alguien estaba dispuesto a pagarme por enseñar basket… INCREÍBLE.

OJE (es el acrónimo de Organización Juvenil Española). Pues la llamada fue de OJE Arganzuela, distrito madrileño que necesitaba un entrenador para organizar y dirigir una Escuela de Baloncesto. Sinceramente no recuerdo ni nombres ni caras ni nada de aquellas pobres victimas que cayeron en mis manos. Solo recuerdo que fue mi primer equipo “profesional” y recibí a la vez una de las sensaciones más definitivas de mi vida. Alguien me pagaba por hacer algo que me apasionaba.

El sueldo era ridículo, 1500 pts./mes (lo que hoy serían… 60€, más o menos), pero yo también era ridículo entrenando. No tenia ni idea de lo que hacia, ni por supuesto, como resolver los problemas típicos que aparecen cuando juntas un montón de niños alrededor de un balón.
Lo que realmente importa en este juntaletras es que ese fue el inicio de mi carrera como entrenador. Con el paso del tiempo y poco a poco… de Oca a Oca, he llegado a los 38 años de práctica casi ininterrumpida como entrenador.

Con ese paso lento, propio de las Ocas, y tras tres meses de paro, acabo de aceptar una oferta de entrenador de un grupo benjamín perteneciente a un colegio privado inglés.
SIIIIIIIIIIIIIII VUELVO A SER ENTRENADOR
¿El sueldo? Pues… 100€/mes. A la altura casi de mi primer equipo comentado. Eso si, en Lanzarote tenía un sueldo normal pero no cobré nada en la última temporada, si en el Montessori School me pagan, ya será un sueldazo en comparación a la temporada pasada. !!!AVANZAMOS!!!. (Juanky, es el momento de agregar foto del cheque impagado que te dio Lyn. Ánimo amigo).

Pero el tema de este juntaletras no es la cuestión pecuniaria sino el volver a sentir una vez más las miradas de unos niños hacia su coach. Cuando en Lanzarote entrenaba a las pequeñas (del 97) ya me parecía increíble tener niñas tan pequeñas (niñas os echo mucho de menos y más aun siendo las autenticas víctimas del desastre provocado por la necedad de un individuo).

Pues así despacio, de Oca a Oca y tirando porque me toca, mis jugadores actuales son nacidos en el 2000 e incluso tengo un crack de cinco años (Sebastián), que cuando acabamos el entrenamiento siempre me enseña dónde jugaba antes cuando era pequeño(¿?), pero ahora no juega ahí porque ya es mayor (increíble y por supuesto, genial). Va a ser una nueva etapa muy divertida y saldrán miles de razones para la composición de nuevos juntaletras. Además prometo novedades muy interesantes que harán correr ríos de tinta en este blog. Ya os contaré.

La reflexión que quiero transmitir es que mis actuales jugadores son nacidos en el 2000. Cuando íbamos en el Delorian (años 70) hablar del 2000 era algo tan lejano, tan inalcanzable, que no os podéis ni siquiera imaginar. Era como ver películas de ciencia ficción.
En esa época, yo era obviamente un niñato que no era capaz de imaginar ser adulto y me daba miedo crecer (¿te suena a algo rubita?).

Recuerdo muchas veladas con mis amigos, los Torres, en las que nos preguntábamos que sentirían sus padres al contemplar desde la atalaya de la experiencia el pasar de los años al ver como todos crecíamos. Poco a poco, generación tras generación, equipo tras equipo, ciudad tras ciudad, he llegado de nuevo a Madrid para entrenar a unos niños de los principios del siglo XXI.

¿Qué siento? ¡¡¡UF!!! Estéticamente he perdido mi evidente atractivo, las mujeres no me ven (excepto cuando van a chocar conmigo), ya no están locas por mis huesos (no los ven), antes era un niñato y ahora soy abuelo (literalmente), antes para la gente era un joven despreciable por ser moderno (¿?) y ahora se dirigen a mi hablándome de Vd. Todo me parece fantástico y me siento increíblemente cómodo y sereno. Los años han venido y me encuentro en esa atalaya que proporciona la veteranía, donde las cosas en mi caso se ven bien, porque de Oca a Oca he realizado un recorrido que me ha permitido conocer muchos detalles interesantes de la vida y me ha ayudado a crecer cada vez más. He encontrado gente y lugares espectaculares.

Cuando entrené a aquellos chicos de la OJE sin tener ninguna experiencia me sentía muy feliz, porque estaba haciendo un trabajo que me apasionaba y ahora entreno a otros, donde profesionalmente sé encontrar muchos detalles técnicos importantes y sobretodo, sigo siendo muy feliz por poder continuar mi camino en algo que me sigue pareciendo un lujo y un privilegio.

Los años me han valido para poder apreciar cada esencia que te proporciona el lugar y el momento en que me encuentro. Cada instante tiene sentido y cada cosa una valoración y en mi caso sigue siendo profundamente positiva. Podría hacer valoraciones mas profundas sobre éste, mi camino pero lo dejaré para otra ocasión.

La intención de este juntaletras no es que copiéis de mí, ni mucho menos. Pretendo simplemente transmitir que he conseguido vivir haciendo lo que me gustaba y a pesar de los lógicos sinsabores, el balance no puede ser mejor. Personalmente el recorrido ha estado lleno de cosas, de vivencias y estoy convencido que en otro trabajo no habría tenido unos beneficios tan llenos de vida. Eso sí, dinero seguro que tendría pero… ¿el dinero sería suficiente? ¿podría escribir y firmar el mismo balance? Yo creo que no.

Gente aquí va mi mensaje: Desde mi atalaya, la vida se ve de la siguiente forma y os propongo…
Ser felices con lo que decidáis de vuestras vidas, trabajos, estudios, parejas y, para que no falle el plan, ser cien por cien vosotros mismos sin ninguna mascara.

Yo mientras tanto, seguiré avanzando de Oca a Oca y tiro porque me toca. Un abrazo para ellos y un beso para ellas. Andrés RG.

8 comentarios:

Coach ATM dijo...

... qué envidia!

Leo dijo...

Yo me quede con la película, de resto ni me enteré jajajaja es broma señor mayor, no quise ofenderle ni mucho menos. Me ha entretenido bastante no puedo negarlo,en cuanto a el mensaje, lo estoy archivando en la carpeta de favoritos, con los mensajitos de los otros.
PD: Muy bonito, pero espero no llegar a caer en gracia con las mujeres a base de barrigazos jajaja. Un abrazo

Sergio dijo...

La bomba!!! Aunque yo también siento envidia. Voy a escribirte este comentario para ver si me da tiempo, tras este corto relato, de dormir un poco para ponerme la tabla de surf bajo el brazo, impresionar a las impresionantes muchachas de esta época y ver el campeonato del mundo de bodyboard.

No hagas caso a coach JK, sigue petando el blog que a todos nos encanta leer y aprender de todo lo que dices.

Que sepas que esa filosofía de hacer lo que a uno le gusta yo la llevo a raja tabla, no hago nada que no me guste y solo pienso en el medio nunca en el fin. El más claro ejemplo es mi carrera, no quiero ser profe, ni entrenador, ni preparador físico... al menos por ahora. Pero es tan espectacular esta carrera, vivir en Las Palmas y ver en un bar al lado de las canteras con Juanki como el Barça gana el clásico(Además se de uno que se va a cambiar de equipo), que no me importa lo que pase después.

Pues eso un abrazo enorme y me alegro muchísimo de tú nuevo chollazo de trabajo.

Ariadna Ch. M. dijo...

Nunca comento, pero tengo que decirte que el título me cautivó (trabajo en un proyecto de clase en el que realizamos una oca y, ¡vaya tela!).

Por consiguiente, la publicación me encantó.

Un beso grande.

Leo dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Leo dijo...

Joooder Andrés, has conseguido que comente Ari... o sea, tu entrada es mejor de lo que pensaba jajaja.

Andres R. dijo...

gracias ari
jejejeje
k casualidad
gracias a todos xk todos sois el reflejo perfecto de mi juntaletras

Unknown dijo...

Que bueno. Es Precioso amigo. Sigue petando el Blog, porque nos encanta.

Sin embargo, pienso que hubieses tenido mayor fama si un chico rubio y guapo como tú llevase una tabla de surf debajo del brazo: http://images.clipartof.com/small/24747-Clipart-Illustration-Of-A-Happy-Blond-Surfer-Dude-In-Blue-Hawaiian-Shorts-Standing-On-The-Beach-With-A-Surfboard.jpg